Algo de Dios y autobuses...

Aplaudo la iniciativa de la British Humanist Association de poner en los autobuses de Londres el lema "There's probably no God. Now stop worrying and enjoy your life" (Probablemente Dios no exista. Ahora deja de preocuparte y disfruta de la vida).

Además, me parece estupendo que ahora se publicite el mismo mensaje en los autobuses de Barcelona. Un slogan que invita a una profunda reflexión de una manera que encuentro simpática y original. Y es que no se trata de debatir la existencia o no de Dios, dilema eterno y discutido hasta la saciedad y del que ya conocéis mi opinión, sino que se transforma el debate en algo más desenfadado y moderno: en los tiempos actuales, coexistiendo las creencias religiosas (de uno u otro credo) con todavía relativa fuerza, a la vez que un pensamiento más científico que responde a los misterios de la vida con argumentos que descartan la existencia de un creador todopoderoso, pensamiento extendido también con relativa fuerza... se hace menos patente la necesidad de justificar esa presencia celestial, aunque también se quiera creer en esa posibilidad para dar un sentido más espiritual o menos frío a nuestra propia existencia. Y de una manera, como digo, simpática, el mensaje que intenta transmitir esa frase es que Dios, a lo mejor existe, pero es muy posible que no, así que no nos obsesionemos con ello, y disfrutemos un poco más del presente, de los momentos que conforman nuestra vida, sin pensar tanto en ese "ojo que todo lo ve", ni en que sucederá en el "más allá": el presente es seguro, así que vívelo intensamente.

En cambio, la contrainiciativa que estos días se ha originado con otro mensaje en autobuses de Madrid: "Dios sí existe. Disfruta de la vida en Cristo", me parece triste, fanática e infantil. En un intento de contrarrestar los posibles efectos de la primera, se intenta transmitir otro mensaje, esta vez sin gracia ni inventiva, totalmente categórico, afirmando sin lugar a dudas la existencia de ese ser superior. Y es que no es más que una rabieta tonta producida por una observación ocurrente. Como si ante un amigo que se queda contigo con alguna broma inteligente se le responde algo en plan "puessss, tú eres idiota". Sencillamente una tonta defensa pueril sin mérito alguno. Y ya rizando un poco el rizo: ¿no podría denunciarse a los responsables de este contramensaje, por "publicidad engañosa"? Claro que, basándonos en la presunción de inocencia, que entiendo que se aplica siempre (salvo en los actos y denuncias de la SGAE) en el juicio habría que demostrar que Dios no existe, algo que precisamente no se puede demostrar, porque los fundadores de las religiones ya se curaron en salud estableciendo adecuadamente eso de que la "Fe" consiste en creer en algo cuya existencia no podemos probar... (Vaya, ahora no me viene a la cabeza el nombre de ese método científico que consiste en demostrar la no posibilidad de algo a través de probar que no es demostrable esa posibilidad... ¿alguien sabe a qué me refiero?)

Y antes de liarme más, acabo con una pequeña conclusión:

He visto a Eric Clapton en concierto, por lo que sé que Clapton existe. Clapton es Dios, ERGO, Dios existe.

;-)

Fuera bromas, preocúpate de lo que de verdad importa: aprovecha el ya y vive la vida. Parafraseando a John Lennon: La vida es aquello que pasa, mientras uno está ocupado haciendo otra cosa....