domingo, 29 de agosto de 2010

Què bonica, Catalunya...





Unas imágenes del fin de semana: el 30 cumpleaños de mi Noemí se merecía algo especial, así que engañada totalmente la llevamos al Pallars a pasar el finde. Noche en Altron, mañana de rafting en el Noguera Pallaresa: Llavorsí-Rialp (otra aventurilla que mi capsulitis de caballo me hace perder. Al menos hice de fotógrafo...).











Jo, qué envidia!







Y después comida, tarde y noche en Sort. Sí, caímos y fuimos a comprar lotería de Navidul a la Bruixa d'Or (más que la bruja, el de oro será el propietario de la conocida "Admon").






No hemos olvidado el placer de la gastronomía: hemos probado canguro (muy fuerte para mi gusto), bisonte (brutal) y por supuesto, er jamón!



Pero lo mejor, el entorno: siempre me han gustado los pueblos de los Pirineos: esas casas de piedra con el tejado de pizarra, en un paisaje verde, azul y gris, tan irregular como son los valles y montañas. Árbol, roca y agua. Pasear mirando hacia los picos, muy arriba, mojarte los pies en el río o descansar oyendo el rumor de su fluir... disfrutar sanamente de este país en el que vivimos, de esta Catalunya.


Una buena dosis de naturaleza para compensar el paisaje urbano en el que pasaremos las vacaciones... pero eso será dentro de 12 días...

martes, 24 de agosto de 2010

Secuestros, rescates, rehenes...

Pienso que ante un secuestro como el que ha acabado con la liberación de Albert Vilalta y Roque Pascual, en el que secuestradores (o piratas, o terroristas…) retienen a voluntarios de una ONG (o periodistas, o trabajadores de lo que sea), el pago de un rescate o el ceder ante las exigencias de esa gentuza es algo peligroso, por el precedente que se crea, por la sensación que se le da a esa gente de “adelante, aprovecha que estás donde estás para retener a alguien inocente para extorsionar a un país entero”.

Por otro lado pienso que si yo fuese el familiar de un rehén (o amigo, u obviamente el propio secuestrado) desearía que se hiciese low que sea por la liberación. Lo que debe vivir esa persona durante meses, las condiciones en las que esté y sobretodo el miedo a morir en cualquier momento, es inimaginable. En esa situación, si me afectase de cerca me daría igual todo, las consecuencias, o el precio que se tuviese que pagar.

Es un asunto complicado, con emociones por un lado, o planteamientos más “globales” por otro. Y por supuesto, da pie a politizar el tema, ya sea para colgar medallas o para criticar actuaciones.

Pero en fin, hoy me alegro porque los dos voluntarios de la ONG Barcelona Acció Solidària están de nuevo libres y con sus familias. Por cierto, mira que es de ser mala persona utilizar a una gente que sólo intentar ayudar a los menos favorecidos de un país. Rastreros!

miércoles, 18 de agosto de 2010

Melilla marroquí!

Ante tal frase, seguro que mucho piensan "Qué antipatriótico!" (algunos otros incluso me tildarán de anticonstitucional, que está muy de moda últimamente). Pero lo siento, y sí, reivindico la devolución de Melilla a Marruecos. Porque, y va para los patriotas españoles que tal vez se estén escandalizando con esto, ¿verdad que considerariais acertada la típica consigna "Gibraltar español!"? Otra cosa será si los bloqueos, protestas, la manera de hacer de unos y otros son adecuados o no. Pero para ser coherentes, es igual de lícito que Gran Bretaña devuelva Gibraltar a España, cómo que España haga lo equivalente con Melilla. O no?

Y luego está lo del Rey. A ver, no lo entiendo: nunca he entendido para qué sirve el rey. "Como relaciones públicas del país, representante diplomático..." siempre me habían dicho. Y ahora resulta que intenta mediar en el asunto y llueven las críticas... a lo mejor habría que revisar su contrato, y si resulta que no se requieren sus servicos, que lo quiten, no?

De todas maneras, me trae bastante sin cuidado si Gibraltar o Melilla pertenecen a España, Marruecos, Gran Bretaña o U$A. Lo único que pido es coherencia en nuestro pensamiento. Porque al final, si todos pudiésemos ver las cosas desde los puntos de vista de los demás, creo que la vida sería más fácil. No?

martes, 17 de agosto de 2010

Arrasando en Gràcia

Creo que no había dicho nada en el blog, pero seguro que ya lo sabéis: los Angels of Mercy tocamos el domingo pasado en les Festes de Gràcia!

El bolo estaba condenado al desastre:

Yo con capsulitis en el dedo, me quité el vendaje la noche anterior. No estaba al 100% pero estamos aquí para esto, no?
La amenaza de lluvia estuvo siempre presente, y alguna gota cayó. Pero el tiempo aguantó.
Aunque alguien de Fecsa la cagó en los cuadros de energía, y los fusibles de los equipos se fundieron dos veces en la preparación del escenario, finalmente pudimos hacer las pruebas de sonido (3 horas de retraso).

Eso sí: pienso el sonido dentro del escenario se resintió por las prisas y los imprevistos. Pero tocamos a la hora planeada! Algo que a las 21:00 no tenía yo muy claro... Al menos nos metimos pal cuerpo una parrillada de carne, cortesía de la organización.

Pero el concierto fue tremendo. Para hacer semanas que no ensayábamos todos juntos, creo que lo hicimos bien. El sitio estaba a reventar y con gente más que predispuesta a pasarlo bien con la música de los Dire Straits. Animando, bailando y disfrutando, cosa que sin duda nos ayuda a pasarlo bien tocando y hacerlo mejor.

Este es sin duda el concierto con más público "desconocido" que ha venido a vernos, y tal vez donde más han disfrutado, así que el balance es más que positivo.

Que conste que habíamos preparado un repertorio limitado a una hora, pero ante la insistencia de la gente de "otra, otra!" y de los propios organizadores, tocamos Tunnel of Love como bis. Regular y algo accidentado, fue nuestro agradecimiento al maravilloso público de la noche.

Gracias por todo. Ahota sólo faltará ver si cobraremos algo por el bolo... :-P

jueves, 12 de agosto de 2010

Matar un ruiseñor

Hoy se cumplen 50 años de la publicación de esta magnífica obra literaria. To kill a mockingbird, de la escritora estadounidenseHarper Lee. Uno de los mejores libros que he leído y su adaptación cinematográfica, protagonizada por Gregory Peck, una de las mejores películas que he visto.

El libro, primera y única obra de la autora, que le hizo ganar el Premio Pulitzer, está inspirado en las propias vivencias de la autora. Narra la historia de un abogado que defiende a un negro acusado de violación en un pueblo del sur de los EEUU en los años 30, desde el punto de vista de los hijos del abogado. Con mucho sentimiento, dolor y humor, podemos ver cómo los niños ven el proceso, las reacciones de los vecinos, la integridad de su padre y sus propias pequeñas aventuras veraniegas. Cómo aprenden lo que significa "justicia". Cómo en el transcurso de la historia ganan cierta madurez, perdiendo inevitablemente parte de su inocencia infantil. Una obra muy emotiva y narrada de una manera muy sencilla. Simplemente preciosa, genial.

Un libro que recomiendo leer encarecidamente, si tenéis la suerte de conocer a alguien que lo tenga, ya que está descatalogado desde hace años. Si no, la película puede ser un buen sustituto. (Sugiero ver la versión en blanco y negro, no la coloreada).

Con un nudo en la garganta al recordar ciertos momentos de la historia, os dejo una cita de la obra:

"Los ruiseñores no hacen otra cosa que crear música para que la disfrutemos. No se comen los jardines de la gente, no hacen nidos en los graneros, no hacen otra cosa que cantar su corazón para nosotros. Es por eso que es un pecado matar a un ruiseñor."

miércoles, 4 de agosto de 2010

Interesante artículo sobre el tema de los controladores

Aunque esté publicado donde está publicado, el siguiente artículo, de Francisco Capella (controlador y colaborador de Libertad Digital), es muy interesante. Lo transcribo aquí de todas maneras:

http://www.libertaddigital.com/opinion/francisco-capella/huelga-de-controladores-aereos-55769/

Tengo formación académica como físico, en inteligencia artificial e ingeniería del conocimiento, y como economista. Soy liberal, comentarista de opinión en Libertad Digital y miembro del Instituto Juan de Mariana. Y soy controlador aéreo en Aena desde hace once años, de lo cual no estoy precisamente orgulloso. He estado destinado en las torres de control de Tenerife Sur y en Madrid Barajas (donde fui instructor y supervisor) y ahora estoy en proceso de instrucción en el centro de control de ruta de Madrid Torrejón. Además he estado en comisiones de servicio en las torres de Almería, Ibiza y Málaga. Aclaro que este artículo lo escribo a título estrictamente personal.

Mis sueldos de los últimos años han estado ligeramente por encima de la media dada a conocer por el ministro Blanco (aquellos más de 330.000 euros brutos anuales). Además mi nómina era de las relativamente bajas en la torre de control de Barajas, ya que estando más o menos en la media de antigüedad y carrera profesional yo solo hacía la ampliación laboral básica (el primer nivel de los tres que había de horas extra). Y Barajas es una torre de categoría inferior a los centros de control, que es donde hay más personal destinado.

Estos abultados salarios se han conseguido mediante la elevación de la demanda de controladores y la restricción de su oferta, fenómenos que no han sido ajenos a la presión sindical y a su capacidad de hacer daño al dejar de prestar un servicio esencial difícilmente sustituible (la unión hace la fuerza, especialmente en un monopolio público como éste). Los propios controladores decidían de forma casi unilateral cuántos eran necesarios durante cada turno en cada dependencia (las configuraciones de referencia, con cantidades a mi juicio infladas y exageradas porque prácticamente siempre solía sobrar personal, a menudo se abrían sectores no estrictamente necesarios y las horas efectivamente trabajadas estaban lejos del límite reglamentario). Dada la limitación de horas a trabajar por convenio (1.200 anuales) se programaban grandes cantidades de horas extra.

Algunos controladores se han presentado ante la opinión pública como responsables trabajadores que sacrificaban su tiempo libre, su familia y su salud (el famoso presunto estrés laboral) para hacer las horas extra y salvar la navegación aérea, al turismo y al país: la verdad es que se aprovechaba cualquier oportunidad para generar esos servicios adicionales y se hacía cola para hacerlos y cobrarlos suculentamente. Simultáneamente el sindicato reclamaba con gran cinismo ante la opinión pública más controladores, justo lo contrario de lo que realmente quería (cualquier economista puede explicar cómo a los gremios les interesa restringir la competencia para elevar sus ingresos y mejorar sus condiciones).

Quizás por la bonanza económica o para evitar problemas políticos los ministros y los directivos anteriores de Aena cedieron ante la presión sindical, básicamente las amenazas de dejar de hacer esas infladas horas extra y quizás también retirar a los profesores de la escuela y parar en seco los procesos de formación. Otras medidas eran y son las típicas de las huelgas de celo: utilizar el reglamento y los procedimientos (estos últimos de nuevo decididos y aplicados según el criterio de los propios controladores) como excusas para ralentizar el tráfico (los controladores aéreos insisten mucho en la seguridad, la cual invocan constantemente y aprovechan para meter miedo al personal, pero de lo que no pueden presumir en general es de eficiencia).

Durante mucho tiempo advertí a mis compañeros de que se estaban pasando y que estaban generando un sistema insostenible, pero obviamente no me hicieron ningún caso y continuaron los excesos y abusos. Y entonces llegó la crisis económica, la reducción del tráfico aéreo y el cambio de ministro de Fomento y de equipo directivo en Aena. Y más recientemente las nuevas leyes sobre provisión de los servicios de navegación aérea. Lejos de practicar una sana autocrítica, el nuevo equipo directivo de USCA (Unión Sindical de Controladores Aéreos) ha decidido huir hacia delante, se han autoproclamado víctimas esclavizadas y han promovido la convocatoria de una huelga. Estoy totalmente en desacuerdo, y además me siento profundamente avergonzado e indignado por lo que he visto y oído en los últimos meses en la torre y en la sala de control. Por eso me he dado de baja del sindicato USCA y estoy considerando mi futuro profesional. En próximos artículos espero ir dando más detalles, aclarando ideas y desmontando diversas falacias difundidas interesadamente por algunos controladores aéreos.

Francisco Capella es director del área de Ciencia y Ética del Instituto Juan de Mariana, creador del proyecto Inteligencia y Libertad y escribe regularmente en su bitácora.

domingo, 1 de agosto de 2010

And the big wheel keep on turning...

And the big wheel keep on turning, neon burning, up above.
And I'm just high on the world
Come on and take a low ride with me, girl...

Adéu, València. Hasta el año que viene.

Uy, no sé, no sé...

Qué anuncios más raros se ven por ahí, no? Aquí llamas y te dejan el psio "limpio" >-)